sábado, 5 de noviembre de 2011

Ecológico 008: ¿Tener en cuenta la "energía gris"?


SI ... 


Un método cada vez más popular para determinar la sostenibilidad de un producto es intentar cuantificar la energía que ha sido necesaria para fabricarlo y transportarlo hasta nosotros -esto es, su "energía gris" o energía incorporada.

  • El transporte hasta el punto de venta puede añadir una cantidad considerable de energía al total de un producto. Además, hay que pensar en los componentes del producto. Por ejemplo, un teléfono móvil puede incorporar plásticos de Estados Unidos, tantalio de Africa y chips de Singapur, y haber sido ensamblado en china antes de llegar a Nueva York.
  • Los materiales con los que se fabrica un objeto influyen mucho en la energía necesaria para producirlo. La diferencia de energía entre una silla de madera de 4 kilos (10 megajulius) y una de aluminio (908 megajulius) permitiría que un ordenador portatil funcionase 400 días.
  • El proceso de fabricación de un producto también tiene un gran impacto en su energía gris. Los materiales que requieren altas temperaturas, como la cerámica y el vidrio, necesitan más energía que los que requieren temperaturas bajas, como la tela, el papel y la madera.

PERO ...
 

No se trata sólo de cantidad de energía que ha sido necesaria para producir algo, sino de la utilidad que se obtendrá de esa energía (la energía gris por uso del producto).
 
  • Algunos materiales son más duraderos que otros. Una silla de madera contrachapada durará sólo unos 10 años, mientras que una de metal puede llegar hasta nuestros nietos. Una taza de cerámica necesita más energía que una de vidrio, pero durará mjs, porque el vidrio es más fragil.
  • Algunos objetos, como los platos y vasos de papel, han sido diseñados para ser desechables, pero pueden usarse de manera continuada. Si vas muchas veces de picnic, la energía total usada para hacer todos los platos y vasos que utilizas puede ser mayor que la que habría sido necesaria para fabricar platos y vasos reutilizables de plástico o de metal.
  • La posibilidad de reparar un objeto puede significar un ahorro considerable de energía en comparación con la compra de un objeto nuevo. La fabricación de productos reparables -sobre todo productos electrónicos- es cada vez más importante para minimizar la energía por uso de un producto.

Páginas 28 y 29. El Guerrero Ecológico. Cómo proteger el planeta con sabiduría. Dominic Muren. Traducción de Pau Vidal Pons. Editorial Oceano Ambar. Barcelona, España - 2009.